lunes, 4 de julio de 2016

La 2ª a la izda., 7-12-15

Esto es el Lecho de Procusto, uno no sabe por dónde le van a recortar, se ponga uno como se ponga, todo lo que sobresalga de la medida impuesta: segado como trigo moridero. Es éste un país superficial, se alaba el gesto y la presencia, nadie va al fondo...
Hacemos campaña para la lectura y no leemos o leemos basura; uno de los principales productores de vino del mundo, uno de los promotores del turismo borrachuzo, se esfuerza en evitar el alcoholismo mientras encamina su economía a bares para el europeo-pedo; los miles de millones diarios gastados en putas se pretenden legalizar para pagar campañas de educación sexual; el snobismo más flagrante visita las temporadas de ópera (con dinero público) mientras se desprecia la música en todas sus formas; el distribuidor de coca y cannabis para toda Europa se escandaliza con quienes buscan la legalización del uso de las drogas; nos reímos de ritos foráneos y mataríamos por nuestra Virgen; queremos monarquía sin poder político pero consentimos que ésta legitime dictaduras teocráticas abominables; vendemos armas y dejamos actuar a "lobbies" que las coloquen en cualquier parte, para después escandalizarnos de sus efectos; nos avergonzamos a diario de nuestros gobernantes pero los mantenemos en sus cargos décadas...
Llego al colmo cuando algún pobre de espíritu se imbuye de patriotismo y dice envidiar a la Francia que canta su himno y luce su bandera sin complejos, mientras nosotros nos despedazamos incluso geográficamente. Queremos y no podemos. ¿Cómo vamos a celebrar la patria en un país que nació a la contemporaneidad con un régimen filonazi que duró cuarenta años y diseñó su propia adaptación a los nuevos tiempos, acojonó, sumió en la ignorancia y en el fanatismo religioso y paramilitar a generaciones enteras, impidió e impide aún la investigación de sus crímenes, creció sobre los cimientos de millones de muertos en una guerra civil apoyándose en el Eje fascista, donde la Iglesia y el Absolutismo abortaron todo conato de Ilustración, un país donde los apellidos de quienes crecieron a la sombra del terror siguen dominando la vida económica, donde las folclóricas de todo tipo y género (incluidos toreo y fútbol) sigue siendo la conversación de la mayoría...? Yo no puedo vitorear nada, no me siento orgulloso.
Ahora es cuando el intelectual caliente dice "¡A la mierda España!", pero no voy a caer en la tentación. Tenemos la obligación de resucitar a este país, usando la Historia para aprender, no para hacernos cantar himnos infames. No es sabio quien hace lo que el sabio, sino quien busca lo mismo; no es repetir lo que dice el profesor de Letras, es disfrutar y aprovechar la lectura. Asqueado de las derechas tradicionalistas y de las leches, teniendo en cuenta que el PSOE se enorgullece de ser de centro (otra forma de decir derecha), cuando vayan a votar les recomiendo tomar la 2ª a la izquierda.



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